Cuidado de uñas para conejos
discapacitados
Las uñas de los conejos son muy parecidas a las de los seres humanos, ya que nunca dejan de crecer. La mayoría de las especies domésticas no las gastan lo suficiente, por lo que necesitan ser cortadas para prevenir un crecimiento excesivo. Cortar las uñas de un conejo es un proceso conocido por ser estresante, pero muy importante, especialmente para los conejos discapacitados. Sus uñas necesitan ser cortadas regularmente para evitar que se partan, rasguen o se enganchen en cualquier tipo de tejido. Mantener las uñas de tu bunny también es una parte importante de la prevención de heridas dolorosas, que los conejos discapacitados son particularmente susceptibles a contraer. Con algo de práctica, el recorte de uñas puede convertirse en un buen momento para unirte a tu conejo y vigilar su higiene general.
¿Qué usar?
Cortauñas: Primero necesitarás un cortauñas. Los modelos para gatos funcionan de manera muy similar a las tijeras, apretando la uña entre dos cuchillas. Los de perros rodean la uña en un círculo y la cortan por todos lados. Preferimos el cortauñas de gato. Asegúrate de encontrar un estilo que funcione con tus preferencias, pero también asegúrate de elegir un tamaño de cuchillas que sean apropiadas para el tamaño de tu cone. Los conejos muy pequeños necesitarán modelos pequeños.
Polvo coagulante para uñas: Este polvo está diseñado para detener el sangrado y ayudar a coagular en caso de si accidentalmente cortes mucho, dañando sus vasos sanguíneos y por lo tanto su uñita comenzará a sangrar. Para usarlo, todo lo que tienes que hacer es colocarlo con un aplicador de algodón humedecido a la uña cortada y ejercer una presión moderada durante 5-10 segundos. Si no tienes este recurso a mano, se recomienda presionar de manera firme con un cotonito de algodón por un tiempo mayor, hasta que el sangrado se detenga.
Toalla: La mayoría de los conejos se ponen nerviosos cuando cortan sus uñas. Te recomendamos envolver su cuerpo para inmovilizarlo de manera segura.
Linterna: Otra cosa que debes tener a mano es una linterna. Se puede usar una linterna para que veas la zona de los vasos sanguíneos de las uñas de tu conejo, para evitar que sangre al cortarlas muy pequeñas.
¿Cómo hacerlo?
Comienza revisando las uñas de tu pequeño antes de comenzar a cortar. Esto te permitirá verificar si hay roturas, uñas problemáticas, o que no necesitan cortarse, etc. Hay cuatro formas típicas de sujetar o controlar a un bunny para chequeos y, luego, para el corte de uñas:
- Puedes poner a tu peque en el suelo con su cola hacia ti. Luego arrodíllate en el piso detrás de él con tus rodillas cerca de su rabo. Inclínate sobre él hasta que estés flotando justo por encima de su cuerpo con los codos en el piso. Usa tus brazos para sujetar a tu conejo en ambos lados. Luego puedes levantar cada pata para revisar sus uñas. Si tu cone está un poco nervioso, coloca una toalla sobre su espalda para que se tranquilice.
- Otra alternativa es poner a tu conejito en tu regazo. Siéntate en el suelo con las piernas estiradas delante de ti. Dobla una toalla por la mitad y colócala en tu regazo para que tu conejo no se resbale. Puedes sostener a tu conejo en tu regazo verticalmente contra tu cuerpo. Coloca al peque en tus muslos, con su trasero hacia ti, para que se acurruque entre tus piernas. Esto te dará acceso a las cuatro patas para verificar. Este método funciona mejor para un conejo menos inquieto.
- La última opción para restringir el movimiento a un conejo y que se deje cortar las uñas es un método llamado 'burrito de conejito'. Es muy efectivo para los ejemplares que no pueden quedarse quietos o que no permiten el recorte. Un burrito de conejito consiste en envolver a tu cone cómodamente con una toalla, que lo sujeta y lo retiene de manera segura para que pueda mirar sus patas y recortar sus uñas. Una vez que está envuelto, simplemente mueve una patita a la vez y procede a cortar.
Con los conejos menos móviles o inmóviles, el proceso de sujetar y restringir un conejo es mucho más fácil. Solo asegúrate de ajustar la forma en que inmovilizas a tu conejo y sus posibles limitaciones físicas. El objetivo es ponerlo en una postura cómoda y lograr que se encuentre en la posición más segura posible. Recuerda que la mayoría de los conejos intentarán huir o liberarse, así que ten cuidado. Nunca intentes revisar sus patas mientras las mantiene alejadas del suelo.